En esta "Chapucilla" vamos a mostrar cómo se cambia un regulador de gas, operación muy sencilla y que requiere la utilización de muy pocas herramientas, además de disponer de otro regulador de repuesto, con una llave inglesa, un destornillador y un cuchillo es suficiente.
En primer lugar procedemos a cerrar el mando del gas. Luego aflojamos un poco la tuerca de fijación del regulador, recordad que esta tuerca gira a derechas para aflojar (al contrario de lo normal).
Para terminar el desmontaje, aflojamos con el destornillador y retiramos hacia atrás la abrazadera metálica que aprieta el tubo de color naranja. Ahora giramos el tubo naranja en su unión con el regulador y cuando gire libremente, tiramos de él hacia fuera. Una vez fuera del regulador, con la ayuda de un cuchillo, eliminamos el extremo del tubo, el cual vemos que está viciado por la presión de la abrazadera.
Antes de seguir debemos comprobar la fecha de caducidad del tubo naranja, caducidad que va impresa sobre su superficie junto a otros datos. Si la goma está caducada o caduca pronto habrá que cambiarla.
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Tomamos el nuevo regulador, el cual alojamos en el puesto del anterior. Apretamos convenientemente su tuerca de fijación (girar a izquierdas para apretar) y a continuación procedemos a introducir el extremo libre del regulador en el interior del tubo naranja, girando la manguera a un lado y otro, hasta que penetre totalmente. Desplazamos la abrazadera metálica hasta la mitad del extremo del regulador aproximadamente y atornillamos convenientemente.
Por último, procedemos a girar el mando de apertura del gas. Para asegurarnos de que se ha hecho una correcta instalación podemos poner jabón líquido en las dos uniones o extremos del regulador y así comprobar que no se produzcan burbujas, de producirse estas será debido a pérdida de gas y habrá que apretar más la unión donde se produzcan.
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